Los médicos le dieron luz verde, pero ni siquiera un "hombre de hierro" como Normann Stadler lo es para siempre. Tras ser operado del corazón hace un mes, el excepcional triatleta alemán no volverá al deporte profesional.
"De todas formas, a final de año habría dicho: se acabó el deporte de élite", explicó hoy el dos veces ganador del Ironman de Hawaii en conversación con la emisora de radio SWR 4 Kurpfalz.
A principios de julio, el triatleta de 38 años fue operado en la clínica universitaria de Heidelberg en una válvula coronaria y en la aorta. Actualemente está en rehabilitación en Ludwigshafen y vuelve a ser casi el mismo de antes. Stadler asegura que los médicos piensan que su corazón está sano. "Incluso mejor que antes", dice. "Pero no voy a volver a hacer deporte de alto nivel".
En su carrera, se expuso innumerables veces al castigo extremo de la élite del Ironman. Durante 20 años, Stadler puso su cuerpo al límite. Ganó dos veces en Hawaii, en 2004 y 2006. Su última prueba la disputó en junio en Zarautz, en España, poco antes de enfrentarse, de repente, a un reto completamente nuevo.
"Esta es definitivamente la pelea más importante de mi vida. No la libro únicamente por mí, sino sobre todo por mi familia", dijo a dpa pocos días después de la intervención.
"No fue ninguna operación de urgencia, pero según especialistas en cirugía del corazón estaba 'a punto de que sonara la campana' y tuve suerte dentro de la desgracia", añadió.
Ahora, adelanta algunos meses el final de su carrera. Para Stadler comienza un nuevo capítulo. A final de año será padre por segunda vez. Y ya piensa en dedicarse a ser manager deportivo.
De momento, ya tiene una tarea. Junto a otros seis triatletas "top" como su compatriota Timo Bracht o el belga Marino Vanhoenacker ha creado un equipo de triatlón. Pero tras el anuncio de salida de su patrocinador, el grupo busca urgentemente un nuevo financista.
Fuente: www.diariodeltriatlon.es
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