martes, 8 de noviembre de 2011

Electroestimulación y secuencia de descanso

Por Pedro García (www.deporteysaludfisica.com)   
lunes, 07 de noviembre de 2011
Un muy buen amigo de nuestra página web nos hizo llegar hace unos días la siguiente pregunta:

"Hola Pedro. Llevo varias semanas entrenando con mi electroestimulador la resistencia aeróbica y noto que cada día las piernas las tengo peor. Cuando salgo a correr, no soy capaz de encadenar varios días buenos de entrenamiento porque acabo muy cansado. Estoy entrenando con el programa resistencia aeróbica en el nivel 2, tres veces por semana. La intensidad en la que me muevo son los 90 microculombios en la secuencia de fuerza, es decir, cuando el electroestimulador aprieta, y la bajo a cero en la que el electroestimulador entra en la secuencia de descanso. ¿Qué puedo estar haciendo mal?".

Más adelante este mismo usuario otro me hizo esta pregunta: "Hola Pedro. La secuencia de descanso que tiene mi Compex; esa, la subo a la misma intensidad que la secuencia de trabajo, ¿verdad? Así entrenaré mejor mis músculos, ¿no?".

¡Error!
Bueno, pues que sepáis, mis queridos amigos de de Electroestimulación Deportiva, que tanto una cosa como la otra está mal hecho. En artículos anteriores de electroestimulación hemos visto que cuando realizamos entrenamientos de fuerza con nuestro electroestimulador, la intensidad de relajación o de descanso no se toca, a no ser que hayas parado el entrenamiento a mitad de la sesión y la intensidad de relajación se haya quedado anclada. Si tocas la intensidad de relajación, como máximo hay que subirla a la mitad de la intensidad de la fase de contracción, es decir, si estás entrenando a 50 Hercios, la fase de relajación (recuerda que la fase de relajación es la que existe entre contracción y contracción) tendrá que estar como máximo a 25 Hercios.

Un programa de entrenamiento de electroestimulación, sin contar la secuencia de calentamiento ni la de vuelta a la calma, consta de dos fases. La fase de contracción, en la que nuestros músculos están trabajando, y la fase de relajación, en la que damos descanso a nuestros músculos para que se recuperen. El tiempo de cada fase va a depender del programa seleccionado. Por ejemplo, los programas que trabajan las fibras lentas, tendrás hasta ochos segundos de contracción contra 2" de relajación, y los programas que trabajan las fibras rápidas tendrán dos segundos de contracción y hasta 30" de relajación. Cuando realizas un entrenamiento con electroestimulación, el trabajo al que estás sometiendo a tus músculos es muy superior al voluntario (siempre que le des la intensidad adecuada). Por ello tus músculos necesitarán descansar entre contracción y contracción, y para ese descanso y recuperación está preparada la fase de relajación, para dar descanso y bombear sangre a tus músculos ayudándolos así a que se recuperen entre contracción y contracción. Si no respetas esta fase y sigues subiendo la intensidad de descanso o poniéndola a cero, estarás sobrecargando la zona electroestimulada, por lo que es muy posible que no realices un entrenamiento efectivo.

Recuerda una vez más: cuando entrenamos, la fase de relación entre contracción y contracción, ¡no se toca!

Otra cosa distinta serán algunos programas de rehabilitación para ciertas molestias y dolencias en los que tendremos que bajar a cero la fase de relajación, pero ese tema lo trataremos en otro artículo

¡Sé feliz!

Pedro García es preparador físico
www.electroestimulaciondeportiva.com

No hay comentarios: